Mito: Sólo el 30% de las empresas familiares sobreviven llegando a una segunda generación, y no más del 13% alcanza la tercera.
Realidad: Los datos son limitados, refiriéndose sólo a un estudio referido a la industria manufacturera de Chicago, donde las empresas perdurarían en promedio 50 años. Considera así como “fracaso”, casos exitosos de empresas listadas en bolsa, fusionadas o vendidas, no permitiendo el re-emprendimiento.
Nuestra propuesta: Ver a la Familia Empresaria más allá de su Empresa Familiar, esto permite distinguir el inagotable espíritu emprendedor, y cómo éste se despliega a través de múltiples iniciativas financieras, sociales y de re-emprendimientos, conformando un verdadero ecosistema familiar-empresarial.