Por Gonzalo Jiménez S.
Una riquísima mixtura en tipos, orígenes, historias y hasta espiritualidad es la que podemos encontrar – era que no, con más de 1.250 millones de habitantes – en las empresas familiares de la India; un mundo que va mucho más allá de la globalmente famosa Tata. Recientemente dicté workshops para empresas familiares en dos ciudades: Mumbai y Bangalore.
En el segundo país más poblado del planeta, 90% de las más importantes empresas fueron fundadas por familias, las que generan sobre 75% del empleo.
Tuve la oportunidad de conocer a Subbiah Murugappa, el patriarca de otro de los conglomerados potentes. Fundada con foco financiero recién iniciado el siglo XX, la compañía también cuenta con un portfolio muy diverso de productos.
Como en gran parte de los grupos familiares indios, los Murugappa también se preocupan de las temáticas sociales y por mantener prácticas corporativas del más alto estándar. Ellos han sabido equilibrar el apego a sus tradiciones con flexibilidad.
Entendieron que los rituales se pueden transmitir de generación en generación para procurar que se mantenga su significado, pero también adaptando las prácticas a los elementos del entorno. Un ejemplo: practican la tradición india de «gurusishya», que permite que las nuevas generaciones aprendan de los miembros más viejos de cada familia y les consulten en la toma de decisiones clave. Durante la segunda generación de la empresa, sin embargo, los Murugappa decidieron ampliar este ritual y permitir que todos los miembros de la familia pudieran aportar en el proceso de crecimiento, provocando un importante cambio en el rol de los integrantes mayores de la familia y movilizando internamente la toma de decisiones.
La experiencia de hasta 17 generaciones en India (¡sin contar las reencarnaciones!) son una buena lección para los grupos familiares chilenos. ¿Están preparados para los próximos mil o al menos cien años? Se requiere para ello no solo voluntarismo, sino también planificación, disciplina y una dosis importante de creatividad.
En el segundo país más poblado del planeta, 90% de las principales empresas fueron fundadas por familias, y generan sobre 75% del empleo.
Gonzalo Jiménez S.
Presidente de Proteus Management Consulting Director Centro de Familias Empresarias & Empresas Familiares y Profesor Cátedra Jaime Said de María UDD.