El director de empresas, Hans Eben, expuso en la UDD sobre su teoría de que el planeta está contaminado con un virus y que Chile no está inmune de esto.
El planeta no sólo ha cambiado sino que es un mundo nuevo, enfermo de un virus que se viene incubando desde principios del siglo XXI, donde la economía global pasó bruscamente desde una euforia de los 90 a una frustración incontenible en este siglo. En lo social, Chile no es la excepción del escenario global… sí lo es en lo económico, cuya salud es mucho mejor que la del resto del orbe, pero el virus avanza y es contagioso y Chile no es inmune.
Esta es la teoría de Hans Eben que ha causado impacto en diversos círculos de influencia y que fue expuesta en la UDD a los alumnos de pregrado, postgrado y profesores de la Facultad de Economía y Negocios.
“El mundo se enfrenta hoy a una crisis que atraviesa a todos los estamentos de la sociedad, afectando los fundamentos de la familia y los valores”, señaló Eben. Además, destacó que el ritmo frenético de la vida cotidiana está produciendo presiones insostenibles en la mente, generando nuevas enfermedades psíquicas de tratamiento desconocido. “No hay tiempo para convivir, dialogar, compartir y, por ende, para progresar. Las calles se empoderaron en desmedro de los gobiernos y del Parlamento y los jóvenes se adueñaron de las redes sociales, un arma nueva del siglo XXI”, manifestó.
Los círculos de influencia han quedado sorprendidos con la originalidad de su análisis respecto de la situación que vive el mundo. Desde su estadía en Boston por 3 años, donde además de trabajar estudió en Harvard (EMP), Hans Eben mostró inquietud por investigar y presentar en forma gráfica la actualidad y las tendencias mundiales. Además, como en ese entonces trabajaba en Gillete Company, tuvo que viajar constantemente por al menos 50 países. Ese ritmo lo ha mantenido casi inalterable. Tomó nota de lo que pasaba en China, Europa, Latinoamérica y empezó a tejer las teorías que hoy lo acompañan a foros empresariales, académicos y políticos de Chile y otros países.
Hoy comparte oficinas con un grupo de profesionales como Vittorio Corbo, Jorge Desormeaux, Mauricio Larraín, Canio Corbo y Ernesto Tironi. A varios los conoció en Boston y eso lo llevó a fundar la oficina El Golf 99. Su particular forma de presentar y entablar teorías, lo ha catapultado como uno de los oradores clave en foros como ICARE, donde fue presidente. Pero también lo han llamado desde la Moneda y algunos ministerios donde ha transmitido su teoría.