En su conferencia, «Desarrollo Económico y Político, un desafío de largo alcance», el académico compartió con el nuevo presidente del Senado, José García Ruminot.
Hace unos días, el economista y académico FEN UDD, Eduardo Aninat, realizó una interesante conferencia en el Campus San Francisco de la Universidad de Temuco, sobre los desafíos económicos y políticos del país: «Desarrollo Económico y Político, un desafío de largo alcance».
Una instancia en la que abordó tópicos como la progresión de algunos indicadores macroeconómicos de América Latina que han mostrado la consolidación de la posición de Chile respecto de sus pares, las condiciones limitantes para el desarrollo del territorio en La Araucanía y la necesidad de establecer acuerdos convergentes entre los distintos actores de la sociedad civil para así propiciar un incremento en las oportunidades de crecimiento regional.
Además, se refirió a la aprobación unánime del proyecto sobre Cumplimiento Tributario, parte del denominado Pacto Fiscal, valorando el hecho, ya que para él esto representa un buen síntoma, ya que por primera vez se está avanzando hacia los acuerdos: «lo que hay que hacer es aterrizar ese pacto fiscal para que después no se entrabe en el senado o en las comisiones, yo sé que es un proceso largo pero entre más rápido y de forma seria se llegue a acuerdos, mejor».
Fue en el marco de esta misma conferencia, que también fue entrevistado por el Diario El Austral, donde se refirió al crecimiento económico de Chile y las falencias que ha tenido el gobierno en ese aspecto. «Yo creo que este gobierno ha intentado mantener sanas las finanzas públicas y también seguir profundizando la apuesta que hizo Chile por el comercio exterior y la apertura internacional; no ser un país aislado, un país como quien dice con murallas económicas como fue Argentina tanto tiempo… Sin embargo, por razones que yo creo que son más políticas que técnicas y, que nos las entiendo, creo que ha estado en falla en el tema del crecimiento y eso deriva en la falta de empleo».
Agregando que «nuestro país es chico y está sujeto a muchos vaivenes internacionales y a disputas nacionales, por ponerlo francamente. Y por lo tanto, necesita crecer. Uno no puede darse ningún gusto si no crece. Entonces la derivada social del desempleo, es que induce a la informalidad. Cuando viene la informalidad del empleo, lo que pasa es que el Estado pierde recursos, no hay cotizaciones previsionales, la pyme informal no puede pagar impuestos, entonces quedamos en la zona gris o negra».
Frente a esto, también incurre en que el Gobierno debería escuchar más los consejos de técnicos más experimentados: «El gobierno escucha mucho a la calle, a mi juicio, demasiado. Y escucha a los grupos juveniles y a ciertos grupos extranjeros. Por eso, creo que el gobierno tiene que abrirse a escuchar a los que tuvieron experiencia, no solo porque tengan experiencia, sino porque tenemos buena voluntad y porque estamos en el mismo país. Hay que aterrizar el lenguaje discursivo en un lenguaje realizador y de acción».
