Hay propuestas transversales de cambios en política, inversión, empleo público y formalización.
En un esfuerzo por superar la actual fase de estancamiento económico y estimular un crecimiento sostenible, el Centro de Investigación Empresa y Sociedad (CIES) de la Universidad del Desarrollo, reunió el pasado jueves 28 de marzo a un destacado grupo de economistas para discutir propuestas concretas y caminos de acción que ayuden a reimpulsar el crecimiento económico en el corto plazo.
El resultado es un informe, titulado «15 Propuestas para impulsar la inversión«, donde se identifican cuatro ejes principales de acción, que ayuden a la reactivación, dado el bajo nivel de dinamismo de los últimos años: mayor certidumbre política, agilización de proyectos de inversión, reforma al empleo público e incentivos a la formalización laboral.
Las propuestas fueron elaboradas por: Gonzalo Sanhueza, Matías Acevedo, Cecilia Cifuentes, Juan Andrés Fontaine, Guillermo Larraín, Rodrigo Wagner, Felipe Jaque, Álvaro García, Ignacio Briones, Joseph Ramos, Jorge Fantuzzi, Cristián Larroulet, Joaquín Lavín, Vesna Mandakovic, Víctor Martínez, Hernán Cheyre. De modo informal, algunos ya se refieren a ese espacio como el “G-16”, por “Grupo de los 16”. El número podría subir.
El diagnóstico es que “más allá de las aristas específicas que ha tenido el debate que se produjo el mes pasado respecto de lo que fue la evolución de la economía chilena durante los primeros dos años del gobierno del Presidente Boric, nadie discute que luego de estarse logrando una paulatina estabilización de las principales variables macroeconómicas se ha producido un punto de inflexión en la evolución de los niveles de actividad que augura mejores resultados para los próximos dos años”.
No obstante, el documento agrega, “también hay conciencia de que el bajo potencial de crecimiento de la economía —en torno al 2% anual, medido por el PIB tendencial— coloca un límite a la expansión de mediano y largo plazo que es absolutamente insuficiente para generar los empleos y el nivel de salarios a los que aspira la población, así como los recursos fiscales que se necesitan para abordar las necesidades más apremiantes”.
En su convocatoria, el CIES-UDD les pidió a los invitados que presentaran “tres medidas concretas que debería adoptar el Gobierno durante los próximos dos años para fortalecer el crecimiento de la economía durante la segunda mitad de su mandato, pero apuntando también a mejorar el PIB tendencial”.
El resultado se articuló en cuatro ejes: certidumbre política, agilización de la inversión, reforma al empleo público e incentivar la formalización. En política, plantean modificar el sistema político en 45 días, apurar la agenda de seguridad y sentar un “plan tributario de largo plazo” que fortalezca el clima de negocios.
En inversión, sugieren “implementar el ‘silencio administrativo» y promover la participación de expertos independientes en la evaluación de proyectos”.
Recomiendan crear la figura de un “asesor inmobiliario”, que sea “un enlace directo entre las partes involucradas en la aprobación de un proyecto de inversión”. Otra idea: identificar proyectos pilotos “cuya aceleración sirva de ejemplo”, como sería el caso del hidrógeno verde. En la dimensión pública, piden acelerar la ejecución del gasto en la materia y dinamizar las concesiones, entre otras.
En cuanto al empleo público, plantean “alinear remuneraciones con el desempeño y fortalecer la Alta Dirección Pública para mejorar la gestión y eficiencia es una propuesta que destaca en esta dimensión”.
Respecto de la formalización laboral (aunque lo extienden a la de empresas), comentan que “en el corto plazo es importante aumentar la participación laboral, para eso medidas concretas y rápidas son avanzar hacia la aprobación del proyecto de Sala Cuna Universal, fomentando la participación laboral femenina”.
Publicación Diario El Mercurio:
